
Y descubrí en tu mirada el día sin oscuridad, porque te necesito como la noche al día; la Tierra como a su órbita, el amor al odio; el cielo y el infierno no serían nada el uno sin el otro... Cómo yo sin ti, que me considero poco, nada se podría decir, no existo, soy inerte, tal vez un mueble que decora/afea la habitación en la que nos encontramos... un ser insignificante, que no sirve más que amarte en silencio, que no puede gritar que te ama con la libertad que quisiera, que no puede dejar escapar ningún suspiro que delate su amor, que no deja que nada ni nadie intente apartar ese sentimiento, porque sabe que ha encontrado a su alma gemela, y no va a hacer otra cosa más que esperar...
EstilazoWeise.
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